¿Qué pasa cuándo se combina el paisaje de nuestros sueños, con grandes olas y a Garrett McNamara? Es sencillo. Detrás aparece Mercedes Benz sorprendiéndonos otra vez.
Con un equipamiento de última generación, Garrett busca un nuevo récord en Nazaré (Portugal). Para variar, no se conforma con llevar algo bueno en sus pies; quiere lo mejor y es normal. Baja metros y metros de agua, escuchando por detrás suyo como empieza a romper la ola. No la ve, pero la siente y aunque tiene miedo a que le atrape y caiga sobre su cuerpo, confía en su tabla. Porqué como sucede con su coche en la carretera, le permite correr y mucho. ¿Si no fuera así, creéis que se metería en esta locura de mar?
Comprobar vosotros mismos de qué estamos hablando y disfrutad. Éste es un edit para los amantes de la velocidad, las olas y el riesgo.
