Saltando al vacío

El piloto de motocross y especialista en saltos acrobáticos sobre moto, el francés Tom Pagès, estuvo los últimos dos años preparándose alrededor del mundo. Pero no fue sobre su moto, sino con algunas de las más destacadas leyendas del paracaidismo y salto BASE.

“La idea nació en el verano de 2019 con la ayuda del ya desaparecido Vince Reffet, el famoso miembro de los Soul Flyers. Era una locura. Sabíamos que ya se había hecho un salto BASE con moto, pero sin realizar ninguna acrobacia”, explica Tom Pagès.

Al inicio del proyecto, Tom ya había hecho 200 saltos en paracaídas, pero aún necesitaba unos cien más antes de intentar el salto BASE. A principios del 2020 viajó a Dubái, donde se unió al grupo “Soul Flyers” para poder entrenar en su campamento.

Después del entrenamiento en el medio oriente, Tom viajó a la Isla Reunión, al este de Madagascar. Ahí estuvo diez días puliendo su técnica en el salto BASE. Finalmente, regresó a Francia, para poner en práctica todo lo aprendido y hacer unos primeros saltos desde puentes.

“Para realizar un salto BASE lo mejor es un puente porque no hay paredes o acantilados contra los que estrellarte, sobre todo cuando estás haciendo un giro al abrir el paracaídas”.

Ya en Francia, saltó también del puente más alto del mundo: el Millau Viaduct al sur del país. “Cuando saltas desde un paracaídas aterrizas en lugares llanos, pero a veces en los saltos BASE tienes que aterrizar en sitios complicados. Debía entrenar en el mayor número posible de situaciones y en el más corto periodo de tiempo”.

Finalmente, el día D llegó y fue en los Alpes, en la estación de esquí de Avoriaz, sin nieve al momento de la filmación. La mega producción fue de más de 50 personas, entre socorristas, el equipo encargado de la moto y otro de la parte aérea, los que instalaron la rampa, logística y el personal audiovisual.

La rampa tuvo una altura de 7 metros y Tom la cruzó en 4to cambio a 80 km/h. Saltó 55 metros, haciendo un doble front flip en el aire, para descender después junto a su moto a 150km/h en caída libre, antes de desplegar los paracaídas (tanto el suyo como el de la moto). Pisó tierra después de 30 segundos y 170 metros abajo.